Dedico esta entrada a todas aquellas personas que ven la comida como algo que aporta felicidad y alegría.
Cuantas veces al disfrutar de una comida, con compañía, nos sentimos felices, alegres, contentos. ..nos sentimos con más ganas, ilusión para hacer lo que tenemos entre manos.
No es que haya realizado un estudio científico sobre el tema, pero pienso que muchas veces la felicidad esta relacionada en gran parte con el buen comer. La mayoría de los españoles tendemos a celebrar todo con un gran banquete, siempre la comida es protagonista de una gran celebración y nunca puede faltar, porque a mí parecer forma parte de nuestra cultura.
Mucha veces una buena comida en familia hace que uno deje de lado las preocupaciones que tiene, lo que anda rondando su cabeza para pasar un buen rato, para dedicar tiempo y escuchar a los que le rodean, todo, gracias a una buena comida, preparada con cariño y con la colaboración de todos. Eso sí que es felicidad.
Muchas veces una persona deja de mostrarse como es porque tiene el estomago vacío. También es bueno hacer disfrutar con la comida, no basta con dar de comer a una familia, sino saber transmitir emociones y sentimientos positivos con la comida . Muchas veces la comida traera a nuestra cabeza recuerdos, momentos felices que hemos vivido. ..o también nos dará animo para hacer con ilusión todo aquello que tenemos entre manos.
En nuestras manos está hacer a los que rodean personas alegres, felices. .y sobre todo cargar las pilas de sus vidas.
Al sentarnos en la mesa cada una cogio la carta y echo un vistazo para ver que es lo que iba a comer. Me fije en esta amiga mía y a medida que iba pasando las paginas se iba emocionando más. Al final optó por un gran plato de pasta, como el resto que pedimos lo mismo.
Es verdad que todas pedimos lo mismo , y todas disfrutamos mucho...pero me llamo la atención esta en concreto porque el plato de pasta lo había disfrutado como ninguna...era la que más hablo en la comida..la que más cosas contó y la que preguntó a cada una de las que estábamos allí comiendo , cosas de nuestras vidas...y es que me dí cuenta de que a esta amiga el hecho de estar disfrutando de un gran plato de pasta le hacía ser ella, le hacía dar lo mejor de ella y sobre todo sabía hacer reír a todas con sus cosas.
Ni más ni menos esta es la conclusión que saqué del plato de pasta. Si quieres hacer feliz a alguien regalale su plato preferido. Le harás la persona más feliz del mundo.
Quiero acabar esta entrada con Esta frase:
En mi familia, efectivamente, toda celebración va ligada a una buena comida, merienda, cena o piscolabis... y celebramos mucho, jajaja, porque la vida está para celebrar!!
ResponderEliminarCentrándonos en mi, la comida también tiene su parte negativa... que es que también sirve de tirita frente a dolores físicos y/o emocionales, y eso ya no mola tanto... ains!
Besotes!